En Estados Unidos una estación de servicio ha bajado el precio del galón de gasolina a 1.99 dólares, lo que sitúa el precio del derivado del petróleo por debajo de los 2 dólares por primera vez desde julio pasado, gracias a la crisis internacional por la sobre-producción.
Una gasolinera de la empresa OnCue Express del estado de Oklahoma ha puesto en venta el galón de gasolina por debajo de la línea de los 2 dólares y se espera que muchas otras sigan por el mismo camino en los próximos días, ante el desplome de los precios del petróleo a nivel mundial.
“Sabíamos cuando vimos los precios del petróleo caer de esa manera la semana pasada que bajaríamos la línea de los 2 dólares muy pronto, pero nunca imaginamos que sucedería en los estados de Carolina del Sur, Texas, Misuri u Oklahoma”, comentó el analista de GasBuddy, Patrick DeHaan.
Los precios del barril de petróleo han llegado a los mínimos conocidos en mayo de 2010, lo que plantea un escenario diferente para muchos países que dependen de este sector industrial para sobrevivir, mantenerse en funcionamiento sin dificultades o implementar planes sociales ya preestablecidos.
Ante este panorama, resulta llamativo que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) haya determinado no tomar medidas para reducir el impacto de la sobre-producción del crudo a nivel mundial, algo que los expertos han visto como una decisión para presionar especialmente a los grandes yacimientos de Estados Unidos.
Positivo para el consumidor, no para la industria
Aunque la gran mayoría de personas de diferentes países se verá beneficiada por la baja de los precios de los derivados del petróleo y por ende es probable que también se vean reducidos algunos servicios de transporte y similares, lo cierto es que la situación ha despertado mucha preocupación en torno al futuro de la industria y la economía de ciertas regiones.
Por ejemplo, en Estados Unidos se proyectan complicaciones que podrían llevar a varias compañías a cerrar operaciones o ser absorbidas por empresas más grandes, lo que conlleva a futuros problemas de competencia y control de la producción del petróleo.
Hace unos días, Venezuela anunció que bajará el gasto público y reducirá los salarios de funcionarios de Gobierno como “medida ejemplar” ante los problemas internacionales del petróleo.