Lydia Smith en IBTimes describe algunas extrañas tradiciones en nochevieja alrededor del mundo
En España y algunos países latinoamericanos, se comen doce uvas, una por cada mes cuando son las 12. Esta tradición viene desde 1895, cuando los viticultores querían vender más uvas en Alicante. La costumbre es para traer un año de prosperidad.
En Ecuador y algunos sectores de Colombia se prende fuego a muñecos rellenos de pólvora para quemar el “año viejo”. Esto marca la limpieza de las cosas negativas del año pasado. Esta costumbre puede provenir de la epidemia de la fiebre amarilla, en la que los cadáveres eran quemados.
En Dinamarca, amigos y familiares dejan platos rotos frente a puertas como un símbolo de afecto y para rechazar los malos espíritus para el año nuevo. Los daneses preparan un festín en nochevieja con un pastel llamado Krasenkage
En Rusia, se escribe un deseo en papel, se quema y las cenizas se ponen en un vaso de champaña, que luego es bebido.
En Rumania, para celebrar, se usan disfraces de oso y se baila en la calle para rechazar a los espíritus malvados.
En Chile, la gente celebra el año nuevo en cementerios con velas encendidas para compartir con sus seres queridos que han muerto.
En Japón, se mandan tarjetas de felicitación a los amigos y familiares, a menos que estén de luto
En Finlandia, los finlandeses queman hojalata en la estufa que luego ponen en agua y la usan para leer el futuro.
En Bielorrusia, las mujeres se sientan al frente de una pila de maíz y un gallo se pone en la mitad. La mujer que esté al frente de la pila de maíz que el gallo escoja se casará primero.