La economía colaborativa ha sido algo que, el año pasado, llegó a tener un gran éxito, gracias a plataformas como Uber, la cual no ha dejado de estar envuelta en la polémica durante los últimos tiempos. Pues bien, ahora, parece que la Comisión Europea, pretende materializar en una cobertura legal los diferentes aspectos en los que flaquea este más que pujante sector.
Es decir, la Comisión Europea, se encuentra preparando su posición política ante las nuevas variedades de la economía colaborativa, que es aquella en la que las personas comparten gastos mientras utilizan un servicio (por ejemplo, el coche).
Uber prohibido en numerosos lugares
España, es, básicamente, el país que se ha convertido en un campo de batalla entre Uber y las autoridades del país y, finalmente, el Juzgado de lo Mercantil nº2 de Madrid, ha prohibido los servicios de Uber, algo que hace entrever los problemas que está teniendo la aplicación para poder encontrar un encaje legal en los diferentes países europeos.
Aunque aplicaciones como Uber, Airbnb o Shareyourmeal representan casos de éxito del nuevo modelo empresarial que es la economía colaborativa, lo cierto es que, a su vez, estas aplicaciones y páginas web suponen auténticos quebraderos de cabeza para los legisladores en todas partes del mundo, que pretenden encajar estas nuevas tendencias con los recelos de los proveedores de servicios tradicionales (como por ejemplo, los taxistas, los más recelosos de Uber).
A todo ello, habría que sumar que la expansión y el éxito de Uber han acabado por tensar (aún más si cabe) la situación. Y es que la aplicación tiene ya problemas en cinco países de Europa (Alemania, Bélgica, España, Francia y Holanda) y además, también en unas treinta ciudades estadounidenses y en La India o en Corea del Sur, debido a que ofrece servicios de transporte sin la licencia correspondiente.
Dentro de dos meses, se tendrá el veredicto
Pero, por su parte, Uber, piensa que debe ser tratada por los legisladores como una plataforma tecnológica y no como una compañía de taxis, algo que parece que, desde la Comisión Europea se va a tener en cuenta, ya que se piensa que su veredicto podrá sentar un precedente para Uber en todo el mundo.
Para así dictar su veredicto, la Comisión Europea, está trabajando en intentar conseguir una posición “horizontal” sobre este asunto, involucrando el aspecto tecnológico, el potencial económico de estas nuevas formas de negocio, así como el impacto en el mundo del transporte (en el caso de Uber).
Por el momento, la Comisión Europea, cuenta, como punto de partida, con un documento elaborado para sus servicios por PricewaterhouseCoopers (PwC), elaborado en septiembre de 2013. Y éste, es un documento, que pone, básicamente, el acento en la creación de estándares de calidad y seguridad para este tipo de servicios. Eso sí, aún quedan dos meses para que la Comisión Europea dé su opinión pero, por el momento, parece que todo está a favor de las instituciones europeas.