El riesgo de que una persona muera antes de cumplir 26 años – por causa naturales, en los Estados Unidos – es menos de un 0.1 %, escribe Zoe Corbyn en The Guardian. Si ese riesgo pudiera ser constante durante nuestra vida en vez de ser incrementado debido a enfermedades por nuestra edad, una persona podría vivir por un tiempo muy largo – hasta mil años.
Esta aspiración, de extender el periodo de vida indefinidamente, es una en la que las empresas tecnológicas estan más interesadas que las fundaciones médicas. Las fundaciones médicas apoyan las investigaciones sobre la biología del envejecimiento, pero su enfoque está en alargar la salud.
Es decir, para estas fundaciones, es más importante alargar por cuanto tiempo una persona es saludable y no tiene ninguna enfermedad. Esto, seguramente, alargaría la vida – las personas saludables viven por más tiempo que las personas enfermas.
Otra parte importante de estudiar la ciencia del envejecimiento es el cambio del abordaje a la salud de las personas. Mientras estaria muy bien que se encontrarán las curas para el cáncer y para las enfermedades del corazón, esto probablemente haría que otras enfermedades aumentaran de forma dramática.
Al llegar a la raíz del envejecimiento, los científicos pueden lidiar con todas las enfermedades como una sola.
En este momento, ya hay 20 drogas que incrementan la longitud de la vida de los ratones. La idea es empezar exámenes en humanos. Es importante notar que no todos los efectos de envejecer son frenados por estas drogas.
Nuestra sociedad cambiaría completamente si los humanos pudieran vivir hasta los 120 y más allá. Aunque apenas se están viendo los primeros frutos de las investigaciones, es posible que no haya un límite biológico cuando se trate de nuestra vida en los próximos años.