Huevos, lechuga, carne y otros productos básicos han visto multiplicarse sus precios en Siria gracias a la presencia del ISIS, con “impuestos” fantasmas que el grupo extremista cobra a los distribuidores y un ambiente de guerra que los vendedores no pueden explicar ante las quejas del público.
QZ informa que los huevos son los que han visto elevar sus precios de forma más dramática en la región, yendo de unos 35 centavos de dólar estadounidense a unos 3.60 dólares por un cartón de 30 huevos, creando complicaciones alimenticias para muchas personas que veían en este producto su única fuente de proteínas.
La historia del precio del huevo y otros productos básicos tiene que ver con la presencia del Estado Islámico (ISIS) en partes de Siria e Irak que tienen ocupadas desde hace ya tres años, ya que sus autoridades han determinado un “impuesto” fantasma para los productores y distribuidores que pasan por su territorio. Los precios del agua y de la electricidad han subido y los productores tienen dificultades para cubrir los gastos.
En palabras de un vendedor de uno de los territorios cercanos al ISIS, la situación es cada vez más compleja: “Se están volviendo cada vez más codiciosos y están poniendo impuestos a todo. La ciudad de Kobane los puso de mal humor contra los kurdos y ahora nos quieren ver con hambre“.
En medio de este panorama, muchos productores y comerciantes locales se han unido para comprar materia prima y productos básicos en grandes cantidades con tal de combatir los altos precios, pero no ha sido la solución definitiva a la problemática y los precios siguen subiendo como la espuma.
También afecta otros productos básicos y otros sectores
La mafia que ISIS ha implantado en su territorio lleva consecuencias a los lugares cercanos y todo queda registrado en los precios que se han ido por las nubes. No han sido solamente los huevos, sino otros productos básicos como lechuga, carne y panes.
Los precios de alquiler de propiedades en la región también se han multiplicado por la demanda que ha crecido debido al desplazamiento de personas hacia estas regiones por la presencia del ISIS, mientras las autoridades kurdas aseguran que tienen poco qué hacer para combatir la crisis de precios y están a merced de los factores de violencia y control de los yihadistas.