Una acusación sorprendente se dio en medio del juicio contra uno de los secuestradores que llevaron a cabo los ataques del 11 de septiembre, ya que se habla de una conexión directa de la familia real de Arabia Saudita con Al Qaeda como una de las fuentes más importantes de financiación para la operación terrorista en Estados Unidos y otros movimientos del grupo extremista.
El francés Zacarias Moussaoui se declaró culpable de varios delitos terroristas como el 20º secuestrador en los ataques del 11 de septiembre de 2001 a territorio estadounidense pero forma parte de un juicio civil por parte de las víctimas y en una declaración abrió la puerta a una información hasta ahora desconocida para el público, relacionando directamente a Arabia Saudita con Al Qaeda.
El acusado asegura que a finales de los años ’90 y gracias a su conocimiento del inglés, Osama Bin Laden le dio la tarea de procesar la base de datos de los principales donantes financieros de Al Qaeda, clasificados por las cantidades que otorgaban.
“Osama quería llevar un registro sobre las personas que daban dinero, para saber a quién escuchar y quién había contribuido con la yihad“, dijo el terrorista en custodia de las autoridades estdounidenses desde hace 13 años por su culpabilidad en los ataques del 11 de septiembre.
Según Moussaoui, varios nombres encontrados en la lista son de reconocidos miembros de la familia real de Arabia Saudita o Casa de Saud, como el Príncipa Turki al-Faisal Al Saud, quien actualmente es el director del Servicio de Inteligencia de Arabia Saudita en el Extranjero y embajador en los Estados Unidos.
El grado de credibilidad de Moussaoui
Ante una acusación de semejante magnitud y aunque el involucramiento de Arabia Saudita con los ataques del 11 de septiembre siempre ha estado sobre la mesa como un tema a dilucidar, muchos aseguran que Moussaoui no es el mejor testigo ni la fuente más creíble a estas alturas de los hechos.
En cuanto a la posición oficial del Gobierno estadounidenses, hay que remitirse a una poca contundente conclusión de la comisión investigadora que reportó en 20014: “No parece que ningún otro gobierno más allá del Talibán haya financiado a Al Qaeda antes del 11 de septiembre, aunque algunos gobiernos hayan tenido simpatizantes de Al Qaeda que se hicieron de la vista gorda a las actividades de recaudación de fondos de Al Qaeda. Esto no excluye la posibilidad de que algunas organizaciones caritativas con fondos del gobierno saudí hayan enviado dinero a Al Qaeda“.