Reportes oficiales señalan que los bancos centrales de todo el mundo compraron la mayor cantidad de oro en los últimos 50 años y, especialmente con los países de la Comunidad de Estados Independientes, se trata de una estrategia para atenuar el fortalecimiento del dólar estadounidense.
El Consejo Mundial del Oro ha publicado un reporte en el que se indica el crecimiento de las compras de oro por parte de los bancos centrales, ya que en 2013 hubo 409 toneladas de oro adquiridas por las instituciones bancarias nacionales y en 2014 la cifra alcanzó las 477 toneledas del metal precioso.
Este número hace que el 2014 haya tenido la mayor cantidad de oro comprado por parte de los bancos centrales en los últimos 50 años, marcando un dato interesante para la economía mundial ante el crecimiento sostenido del dólar estadounidense, las dificultades del euro y el desplome del rublo junto con la caída de los precios del petróleo.
Justamente la caída del precio del crudo a nivel internacional junto con la desaceleración de la economía y los conflictos políticos han obligado a las autoridades bancarias nacionales a buscar soluciones para mantener el camino de estabilidad y tomar precauciones por las crisis financieras que están a la vuelta de la esquina.
De forma interesante, la demanda general del oro bajó con respecto al 2013 pero los bancos centrales aumentaron su interés por adquirir el metal precioso como herramienta de estabilidad económica interna.
Rusia y sus vecinos quieren atenuar la crisis
Los países que incrementaron de forma exponencial sus compras de oro a nivel mundial fueron los miembros de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), como Rusia, que agregó 173 toneladas de oro a las 1.200 que tenía en reserva para paliar la caída del rublo con respecto al dólar en medio de los problemas económicos locales.
La tendencia para bajar el impacto del fortalecimiento del dólar hizo que otros bancos centrales como los de Irak y Kazajistán registraran llamativas compras de poco menos de 50 toneladas cada uno, quizás por consejo de la CEI, aumentando sus reservas en poco tiempo para tener con qué responder.
En el otro extremo, Ucrania se convirtió en uno de los mayores vendedores de oro del 2014 al deshacerse de 19 toneladas con tal de tener mayor efectivo para afrontar las dificultades internas que ha generado el conflicto con Rusia, que oficialmente aún no tiene intervención extranjera.