El virus del VIH puede convertirse en una mutación de sí mismo cuando está dentro de un huésped. Una de estas variantes, observada en pacientes en Cuba, parece ser mucho más agresiva que las formas conocidas del VIH, reporta Science Daily.
La investigación estudió la sangre de 73 pacientes recientemente infectados. 52 estaban diagnosticados con SIDA y 21 no tenían SIDA. Luego, los investigadores compararon los resultados con la sangre de 22 pacientes que habían progresado al SIDA después de un periodo normal y saludable en el cual tenían VIH.
“La nueva cepa es una combinación de fragmentos de los subtipos D, A y G del VIH y aunque su origen es africano, solo se ha vuelto epidémica en la isla”, reporta El Nuevo Herald.
Esta variante del VIH puede causar SIDA dentro de tres años después del momento de infección, un periodo mucho más corto del esperado. Tan rápido es, que existe la posibilidad de que los pacientes no sepan sobre su infección ni lo sospechen.
El estudio es exploratorio. Esto significa que se necesita más información.
En este momento, las personas pueden vivir una vida normal con VIH teniendo atención médica. No existe una cura ni una vacuna, pero las medicinas pueden llevar a la persona con el virus a tener una expectativa de vida normal o casi normal.
Sin tratamiento médico, se estima que el paciente viva más o menos 10 años después de contraer la infección, dependiendo de la cepa del VIH. Despues de un diagnóstico de SIDA, sin tratamiento médico, la expectativa de vida es entre seis y 19 meses.
Aunque existen tratamientos aun después de diagnosticar el SIDA, hay que considerar que no todos tienen acceso a una buena red social y buena atención médica. Los pacientes que están en riesgo suelen ser personas en posición de desventaja.