Cuando pensamos en el futuro a todos nos surgen muchas preguntas: ¿Cómo será el mundo? ¿Cuántos recursos naturales nos quedarán? ¿Seguirá EEUU siendo una superpotencia mundial? La mayoría de ellas no tienen una respuesta clara, pero de momento, gracias a la consultora PWC, podemos saber qué economías habrán crecido más en 2050.
Según el informe publicado por PWC, dentro de 35 años, India habrá sobrepasado a Estados Unidos como segunda economía mundial. Sí, segunda, porque la primera continuará siendo China.
El cálculo se ha realizado usando el método de Paridad del Poder Adquisitivo, un sistema comparativo que mide el crecimiento del volumen económico a precios constantes.
A pesar de que el cambio económico no necesariamente debe llevar consigo un cambio a nivel político, sí es relevante que se recortarán y mucho las diferencias económicas entre Asia y Europa occidental.
Por tomar otro ejemplo, países como Vietnam y Bangladesh crecerán alrededor de un 5% anual durante estas próximas tres décadas y media y, junto a Nigeria, serán los países que más crezcan. En buena parte, gracias a sus grandes tasas de natalidad.
En 2050 también México tendrá una economía muy potente, ya que su PIB, como el de Indonesia, ya será mayor que el de países como Reino Unido o Francia.
Turquía habrá superado a Italia y dura será también la caída para España, que si en 2014 ocupa el puesto 16, en 2050 se encontrará en el 26, por debajo de países como Irán, Malasia o Pakistán.
Por otra parte, si tomamos como referencia la renta per cápita, el índice que mide cuánto corresponde de la economía de un país a cada habitante, Estados Unidos seguirá siendo el líder mundial en 2050, seguido de Australia, Alemania y Corea del Sur, que continuará creciendo con fuerza.
Para John Hawksworth, economista jefe de PWC, esto refleja que a pesar del crecimiento global, la debilidad en cuanto a renta per cápita, dificultará todavía que los países asiáticos puedan tener gran influencia en las decisiones políticas.
Aún así, pueden representar una gran oportunidad de negocio, por ejemplo, para las exportaciones de Europa. Ello permitirá a los países del viejo continente paliar el lento crecimiento económico que le pronostica el informe, en parte, debido al envejecimiento de la población, que restará fuerza de trabajo y sumará una gran carga en pensiones para los estados.