American Express perdió una demanda antimonopolio y deberá modificar condiciones comerciales en acuerdos con varias empresas, por lo que sus clientes afrontan la posibilidad de perder muchos beneficios y facilidades, lo que seguramente hará que la compañía ceda terreno con sus principales competidores.
El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ganó su batalla legal contra American Express, en una resolución que obliga a la empresa de tarjetas de crédito a reducir sus tarifas con respecto a los comercios y cambiar otras obligaciones en sus relaciones contractuales.
Esta decisión impactará en las ganancias de American Express y en sus políticas de sostenibilidad y crecimiento económico para los próximos años, por lo que se podría traducir en dificultades para mantener los planes de beneficios y facilidades para sus clientes, que empezarán a desaparecer.
JUST IN: American Express says antitrust decision is “wrong” and it plans to appeal. $AXP pic.twitter.com/81bobbkMNp
— CNBC Now (@CNBCnow) febrero 19, 2015
Aunque American Express anunció que interpondrá una apelación para que las autoridades judiciales revoquen la resolución conocida esta semana, será difícil conseguirlo y los expertos aseguran que la empresa debería abocarse a encontrar soluciones para paliar la crisis que se le avecina.
El tema principal es que Visa y Mastercard, principales competidores de American Express, cobran menores tarifas a los comercios que aceptan otras tarjetas de crédito, por lo que esta decisión modifica el panorama en la industria. Si AmEx decide recortar sus tarifas, no podrá mantener las mismas recompensas ni programas para sus clientes.
Más problemas para American Express
Esta decisión judicial podría incrementar el número de restaurantes que soliciten a sus clientes que usen otra tarjeta de crédito, tomando en cuenta las tarifas reducidas y las mejores condiciones que presentarán Visa y Mastercard en un futuro bajo este nuevo modelo.
Para AmEx, esta resolución no ha sido el único problema de los últimos meses. JetBlue anunció la terminación de un contrato de colaboración que le había dado buenos réditos a la empresa de tarjeta de crédito. Algo similar sucedió con la cadena de supermercados Costco y a esto se suma el anuncio de un recorte de 4.000 puestos de trabajo que se dio a conocer en enero pasado.