El miedo a no exponer tu idea “por si te la roban” es algo que en el mundo del nómada digital no funciona. La visión externa es fundamental para madurar una idea o desecharla. Esta estrategia de crecimiento donde todos ganan se celebra esta semana en el Digital Nomad Retreat de Lisboa.
Si algo hace increíble el nomadismo digital es la posibilidad de trabajar donde quiera que estés. Esa es la principal razón por la que el ‘digital nomad’ escoge este modo de vida.
Pero la sociedad es necesaria: el individuo necesita al otro y esto se aplica más aún en el sector del emprendimiento donde escuchar otro punto de vista es imprescindible. Es por ello que cada vez es más común trabajar en coworking pues ayuda a impulsar proyectos, desarrollar ideas y ¿por qué no? Encontrar a los socios que necesitabas.

Cómo funciona el coworking
Coworking viene de trabajar juntos incluso si no existe un proyecto en común. Quizá uno es el mejor en SEO pero otro es experto en copywriting. Entonces ¿Por qué no colaborar? Para ello es esencial conocerse, describir quién eres, cuales son tus expectativas y tu idea de negocio.
Trabajar juntos ayuda no sólo en el sentido de que “cuatro ojos ven más que dos” sino también en cuanto al ahorro de tiempo y dinero. Pues se comparten gastos, espacio y diferentes puntos de vista. En definitiva, hacer coworking permite crear sinergias que ayudan a completar tu proyecto emprendedor.