Reportes locales señalan que un reducido grupo de personas ha liderado a la población para defender los puntos claves de la ciudad de Palmira y el Estado Islámico ha suspendido sus movimientos de destrucción.
Según un corresponsal del diario Le Monde, 50 civiles en Siria han sido suficientes para torcer la voluntad de ISIS en la histórica ciudad de Palmira, que se ha convertido en un sitio preferido de saqueo y devastación.
Palmira es conocida como la Ciudad de las Mil Columnas y hasta hace unos años era el destino turístico más importante de Siria, reconocido por la UNESCO como un lugar histórico a la altura de la Acrópolis de Atenas o Petra en Jordania.
También ha sido uno de los destinos favoritos del Estado Islámico, que ha logrado millones de dólares en ingresos por el contrabando de arte extraído de la región, al menos hasta que los civiles en Siria dijeron basta.
Sufrimiento en la población
Más allá de detener la destrucción material, la violación de los derechos humanos sigue en Palmira y, como indica un artículo de The Times, las mujeres son las principales víctimas de una red de tráfico de personas.
Destrucción de sitios históricos
Hasta el momento, se estima que un 80% del sitio histórico de Palmira ha sido destruido antes de la férrea oposición de los civiles en Siria, todo confirmado por imágenes de drones rusos y con una proyección de reconstrucción de al menos cinco años, según los expertos.