Angela Merkel anunció un plan de adaptación de los refugiados e inmigrantes con incentivos de estudio y trabajo y deportaciones inmediatas para los buscadores de asilo que no cumplan con los requerimientos.
Las nuevas disposiciones sobre inmigrantes fueron confirmadas después de una reunión de varias horas y entre ellas se incluyen la obligación de aprender el idioma y nuevas regulaciones contra el terrorismo.
Una legislación sin precedentes
Es la primera vez que una ley de inmigración e integración se impone desde que se dio el programa para atraer extranjeros (turcos) como “trabajadores invitados” en el periodo posguerra, una de las etapas más criticadas por la falta de control en el flujo de inmigrantes y su posterior adaptación.
Ahora que cientos de miles de refugiados han llegado al país, tenemos una doble tarea: manejar y controlar el flujo de refugiados y no solamente registrarlos sino también integrarlos”, comentó Merkel.
Cursos subsidiados por el gobierno
La integración de los inmigrantes tendrá en un enfoque de premio-castigo en el que el gobierno le pagará los cursos de ayuda a los recién llegados y negará los permisos y rechazará las solicitudes de asilo a los que no acepten las condiciones.
“Diferenciaremos entre aquellos con buenas y malas intenciones para permitirles quedarse pero todos tendrán la misma oferta a la hora de llegar”, explicó la canciller alemana.
Protección para trabajadores
Según un artículo de AFP, Alemania aprobará fondos para crear 100.000 empleos para buscadores de asilo y todos aquellos que pasen el periodo de capacitación y obtengan el trabajo, quedarán protegidos de cualquier proceso de deportación.