Es muy importante buscar conexiones. Las personas con las que has trabajado y las personas nuevas pueden proveerte con oportunidades de trabajo. Crear redes es una habilidad crítica y la verdad es que no todos somos muy buenos en ella.
Te puedes estar tropezando por estas cosas, escribe Suzanne Lucas en The Muse:
1. Piensas que se trata de ti

Todas las relaciones en los negocios se tratan de mi. No es verdad… aunque todos deben saber cuales son tus habilidades, también tienes que saber de ellos. La gente quiere hablar de sí misma, así que déjala. Recuerda, la ayuda es ayudarse entre sí, no ayudarte.
2. Entras a las entrevistas informativas bajo falsos pretextos
Si quieres hablar con una persona sobre un trabajo, no pidas una entrevista informativa. Una entrevista informativa es donde aprendes sobre la empresa o trabajo de una persona, no un truco para entrar a una empresa o una reunión en la que le terminas diciendo a un contacto porque te debe contratar. Nada te hará quedar tan mal.
3. No estás interesado en ayudar a los otros

Las redes sociales no solo trabajan para ti. Si alguien te ha ayudado a conseguir trabajo pero cuando ellos te necesitan no les prestas atención, tu reputación sufrirá terriblemente. Trata de ayudar a todos tan frecuentemente como puedas.
4. Solo hablas cuando necesitas algo
No le has dicho nada a tus contactos en LinkedIn por la mitad de una década, pero necesitas un trabajo y les mandas un correo a todos. Esas personas no se van a sentir inclinadas a ayudarte.
5. Divulgas demasiada información
Debes mantener las relaciones con la gente, pero no les digas más de lo indicado. No discutas los problemas que tienes con tu cónyuge con un ex-jefe. No hables de tu situación económica a fondo con tus colegas. No cuelgues un anuncio en internet que dice que estas buscando un trabajo nuevo porque odias a tu jefe. Simplemente “Estoy buscando un trabajo nuevo” funciona.