Los expertos de medicina y salud a nivel mundial aseguran que la nueva vacuna contra el ébola modificará la situación en África ya que los resultados de las primeras pruebas demuestran un 100% de efectividad para combatir el virus.
Un artículo publicado por The Lancet presenta los datos recopilados en el estudio efectuado con la nueva vacuna contra el ébola, señalando la importancia del 100% de efectividad alcanzado en más de 7.500 personas que formaron parte de la prueba realizada en Guinea.
El estudio confirmó que la nueva vacuna es poderosa para prevenir y erradicar la propagación del Ébola en las regiones africanas que más han sufrido por esta enfermedad en los últimos tiempos, ya que una sola inyección es efectiva después de 10 días para proteger al paciente de los efectos del virus.
Según los científicos, las implicaciones positivas de la nueva vacuna contra el ébola son aún mayores ya que también actúa sobre los individuos que no han sido vacunados pero tienen interacción con los que recibieron la vacuna: “La vacunación puede reducir el riesgo de enfermedad no solamente en las personas vacunadas sino también de forma indirecta en la población no vacunada“.
Una solución efectiva muy cercana
Como publica The Times, el estudio continuará y expandirá su alcance a mujeres embarazadas y niños lactantes, pero los expertos son optimistas y esperan que el desarrollo normal del proceso determine que la nueva vacuna contra el ébola será el arma más efectiva para contrarrestar el virus en la región.
“Lamentamos que las pruebas no hayan comenzado antes pero lo importante es que ahora está todo sobre ruedas y ha demostrado ser segura y efectiva“, señaló Ian Jones, profesor de la Universidad de Reading sobre el avance a nivel mundial después de la epidemia que explotó en 2014 en varios países de África.
Los investigadores están trabajando para atenuar los efectos secundarios que se presentaron (fiebre alta en algunos casos) para hacerla disponible al público y a las instituciones gubernamentales y humanitarias que trabajan en la región después de la aparición de miles de casos que ahora han llegado a más de 27.000 en Liberia, Guinea y Sierra Leona.