Cuando se trata de la geografía, tus preferencias están conectadas con qué tan extrovertido o introvertido eres. En una serie de estudios, investigadores de la Universidad de Virginia encontraron que los extrovertidos prefieren la playa en vez de las montañas y viceversa.
Shigehiro Oishi desarrolló su hipótesis basado en la teoría de “persona-hábitat”, la idea de que las personas seleccionan diferentes ambientes basados en sus valores y deseos. Las personas extrovertidas buscan oportunidades para socializar y llamar la atención mientras que las personas introvertidas buscan oportunidades para estar solos.
Oishi y su equipo presentaron un cuestionario a 921 estudiantes sobre su personalidad. Luego, los estudiantes respondieron si preferían el océano a las montañas. La introversión estaba relacionada con las montañas, mientras que la extroversión estaba relacionada con la playa.
Aparte de eso, los gustos no estaban relacionados con otras partes de la personalidad, solamente introversión o extraversión. Tampoco estaban relacionados con factores socioeconómicos, edad o sexo, aunque los afroamericanos tendían a preferir la playa.
El experimento fue ratificado con otro visual, en donde los investigadores le mostraron a un pequeño grupo seis pares de fotos de playas o montañas y les preguntaron qué preferirían visitar si el resto de factores, incluyendo el costo y la oportunidad, fueran iguales.
En este caso, los voluntarios que venían de un sector socioeconómico más alto solían preferir la playa.
El estudio ciertamente tiene límites. Los investigadores no pudieron determinar si la personalidad dictaba la preferencia geográfica o al revés. Aun así, el estudio es una buena forma de recordarnos que lo que nos rodea puede ser similar a nuestra personalidad.