Siempre que se habla de desigualdad social saltan sobre la mesa varios factores y soluciones como implementar una nueva escala de impuestos, mejorar los sistemas de educación y salud o proyectar sectores comerciales, pero Tim Worstall de la revista Forbes cree que existe una posibilidad que nadie toma en cuenta y será el punto fundamental.
“Ya podemos cesar de perder el tiempo hablando sobre la desigualdad social. La demografía hará más por recortar la brecha de riqueza que otros factores como los impuestos para los millonarios, los acuerdos comerciales internacionales o cualquier otra propuesta de izquierda pensada a medias“, asegura Worstall,
En su sección en Forbes.com, el analista británico se basa en un dato del Banco Mundial que señala que el sector de la población con edad laborable a nivel mundial llegó a su punto más alto en 2012 y desde entonces viene en una tendencia a la baja, algo que según su visión modificará el panorama social de los próximos años.
“¿Por qué es importante? En las últimas décadas, con China y otros países desarrollados llegando al mercado económico global, miles de millones de personas también entraron al mercado laboral. Como habían muchas personas disponibles para trabajar, la desigualdad social se elevó en los países ricos, mientras los salarios de los empleados de nivel medio bajaron por la competencia extranjera“, explica.
Para Worstall, la desigualdad social se incrementó en los países desarrollados sin importar las medidas que hayan tomado en temas como impuestos, acuerdos comerciales, creación de sindicatos y nuevas políticas sociales.
Por eso el autor afirma que no se trata de coincidencias y que en el futuro cercano se verá un proceso inverso: “La causa de todo esto fue la cantidad de trabajadores a nivel global… Por eso a medida que el número de trabajadores disminuya, el exceso de mano de obra también lo hará, elevando los precios de los salarios. La desigualdad social simplemente caerá por su propio peso“.
Worstall destaca que si bien los programas sociales, la implementación de políticas y las ayudas son importantes, la desigualdad social es una cuestión demográfica que verá su propia solución con el paso del tiempo, siempre y cuando se mantenga la tendencia a la baja en la población mundial.