Las personas que trabajan durante muy largas horas generalmente beben más que las personas con un horario de trabajo más ligero, escribe Melissa Dahl en Science of Us.
De acuerdo al estudio, ‘muchas horas’ significan más de 48 horas por semana en el trabajo. El número de bebidas que se consideraba riesgoso dentro de una semana eran 14 bebidas por mujer y 21 bebidas por hombre.
De acuerdo al estudio de 333.693 personas en 14 países, la propensión a tomar más sube con las horas extendidas de trabajo un 11%. Aquellas personas que trabajan de 49 a 55 horas por semana son más propensas a consumir alcohol de forma riesgosa en un 13% más que las personas que trabajan de 35 a 40 horas por semana.