Desde hace unos meses, la venta de vacunas falsas de Covid-19 es una nueva forma de que los delincuentes ganen grandes sumas de dinero. China está haciendo todo lo posible para erradicar el fenómeno. Recientemente, las autoridades chinas han detenido a uno de los líderes de la banda.
Desde finales del año pasado, China ha anunciado que ya ha detenido a unos 70 delincuentes activos en el marco de la lucha contra las vacunas corona falsas. De este modo, los servicios de seguridad ya han desarticulado unas 20 redes. Esta semana las autoridades anunciaron la captura de un pez gordo: un hombre con el ilustre apodo de Kong.
Semejantes a las vacunas reales
Kong estudió con gran detalle el embalaje de las vacunas reales contra el Covid-19. Una vez que los había reproducido cuidadosamente, los llenaba con jeringuillas que contenían vacunas falsas. Se componen de agua mineral o de una solución salina.
Kong comenzó la estafa en agosto. En total, él y sus cómplices produjeron y vendieron unas 58.000 dosis de vacunas falsas. Eso les hizo ganar unos 18 millones de yuanes. Eso supone la friolera de 2,3 millones de euros.
Las vacunas a base de agua pueden parecer una estafa de aficionados, pero el sistema era realmente ingenioso. Según las autoridades chinas, la banda de Kong había montado una tapadera convincente. Habían conseguido convencer a algunos compradores crédulos de que habían obtenido sus dosis a través de los “canales internos” de los auténticos fabricantes de vacunas.
El embalaje era tan realista que los investigadores chinos tuvieron que pedir a las empresas farmacéuticas que confirmaran que no se trataba de sus productos, según el periódico estatal chino Global Times.
Abundan las estafas con las vacunas
Otras bandas realizaron sus propias campañas de vacunación falsas. Reclutaron a médicos de pueblo para que inyectaran dosis falsas en las casas de la gente, o incluso montaron locales reales de autocine.
Las recientes detenciones son el resultado de una operación del Ministerio de Seguridad Pública de China para combatir la producción y venta ilegal de vacunas falsificadas, el contrabando, la vacunación ilegal y otros delitos relacionados con las vacunas.
El máximo órgano judicial de China, la Fiscalía Popular Suprema, ha instado a los organismos regionales a cooperar con la policía para frenar estas actividades.
Fuente: Business AM